La Primera Junta de Gobierno surgida de la Revolución del 25 de Mayo de 1810, se propuso  irradiar sus ideales y propagar la revolución. Para eso, invitó a los pueblos del virreinato a que designaran representantes y los enviaran para la conformación de un congreso.

El Paraguay tuvo una postura de oposición a la junta de Buenos Aires. Esta contrariedad tenía su origen en el aislamiento que le produjo la creación del virreinato del Río de la Plata, con Buenos Aires como capital, lo que generó un gran localismo y problemas económicos y políticos.

La Junta de Buenos Aires, apoyó al partido favorable a la revolución y mandó conformar una fuerza militar con el objetivo de marchar sobre la Intendencia del Paraguay.

El 4 de septiembre de 1810 se designó a Manuel Belgrano, al mando de las tropas que operarían en la Banda Oriental y el 22 se amplió su comando a las provincias de la mesopotamia y al Paraguay. 
Belgrano debía imponer la autoridad de la Junta de Buenos Aires y en caso de no lograr este primer objetivo, facilitar la instalación de un gobierno independiente con el que fuera posible establecer relaciones diplomáticas propicias.
El 23 de setiembre se constituyó en el campamento de San Nicolás de los Arroyos una reducida fuerza de doscientos hombres y el 26 partió Belgrano de Buenos Aires. El 28 ya iniciaba la marcha al frente de sus tropas. 
El 1º de Octubre la expedición llega al Paso de Santo Tomé y cruza el Río Salado hacia Santa Fe. En esta ciudad permanecerá Belgrano hasta el día nueve.